Las aves buscan un lugar donde refrescarse en las aguas que se forman en la zona. |
Sólo se percibe su presencia en los días de lluvia, bien con aguaceros muy intensos o porque las tierras empapadas empiecen a drenar por su superficie la gran cantidad de agua caída
IRO XXI | CHICLANA
De la cuenca hidrográfica, que se le asigna al río Iro de 218 kilómetros cuadrados, el 60 por ciento corresponde a la superficie y lógicamente al agua que le aporta el arroyo del Salado y el otro 40 por ciento corresponde al arroyo de la Cueva.
Si seguimos curso arriba del Salado, el primer “subafluente” con el que nos toparemos es el llamado arroyo de las Tortas, que desemboca frente al cementerio mancomunado, en un punto cercano a la margen derecha de la carretera a Medina Sidonia. Este arroyo así como la mayoría de los “subafluentes”, que son muchos en la cuenca del Iro, son sólo producidos por la escorrentía, es decir por las aguas de lluvia que recogen, sin que a ellos acudan aguas, en la mayoría de los casos, de ningún manantial. Sólo se percibe su presencia en los días de lluvia, bien con aguaceros muy intensos o que por la gran cantidad de agua caída, las tierras empapadas ya empiecen a drenar por su superficie.
La única manera de determinar su cauce, en tiempos secos, es observando, con meticulosidad, la vegetación más consistente y densa que crece a lo largo de todo su lecho.
Este arroyuelo de las Tortas, tiene además una singularidad, pues a él evacúan las aguas que excedan de la capacidad de almacenaje de la laguna de Jeli.
Esta laguna, cuyo perímetro tiene forma, que se asemeja a un triángulo, de unos 800 metros de longitud y 450 metros de anchura, su vaso, de arcillas muy impermeable, permite una profundidad que llega a ser de mas de dos metros, sus aguas se consideran como “dulces”. Por muchos está considerada como de aguas permanentes, aunque en grandes ciclos de sequía ha aparecido cercana a su agotamiento.
Se encuentra situada al noreste de Chiclana y a 3,5 kilómetros de la carretera de Medina, dentro de la finca de la Vitoria.
La laguna, un lugar natura idílico |
Entre las especies que suelen nidificar entre su vegetación, están el somormujo lavanco, el calamón común y la focha cornuda. Aunque su mayor interés estriba en la presencia de muchas aves de paso camino del continente Africano, debido a la proximidad del pequeño lago al estrecho de Gibraltar. Malvasías cabeciblancas, cercetas pardillas o flamencos, además de muchísimas cigüeñas, se han llegado a avistar más de 700 ejemplares en algún momento, e incluso alguna espátula, todas utilizan la laguna como una verdadera estación de servicio, donde reponen fuerza en su volar por la “autopista aérea” que une el norte de Europa con el continente africano.
Se ha comprobado desde hace años como muchas parejas de cigüeñas se hacen sedentarias, en la zona, pues se nutren de comida entre los vertederos cercanos como el de Miramundo y la vegetación y ricas algas de la laguna. Lo mismo ocurre con cigüeñas provenientes del norte de España y de Europa que invernan en la zona sin necesidad de cruzar el estrecho de Gibraltar.
La vegetación que crece dentro de la laguna y en los bordes de la misma, compuesta sobre todo por juncos, eneas, castañuela y tarajes, jugaron un papel importante, hasta los años setenta del pasado siglo, como material imprescindible para la cubrición, mediante sucesivas capas, de las chozas. Este material vegetal de la cubierta era necesario reponerlo periódicamente, en función de la intensidad de las lluvias anuales, se le llamaba “echarle una camisa”.
¿SABÍAS QUÉ?
- Esta laguna de Jeli y la de Montellano, tienen ambas la misma superficie de cubeta (23,5 ha) y son de las mismas características ambientales. Montellano está situada al norte de Jeli, entre los términos de Chiclana y Puerto Real, juntas forman el Complejo Endorréico de Chiclana.
- Estas lagunas, se encuentran protegidas como Reserva Integral Zoológica desde 1987, declarando además una Zona Periférica de Protección que las envuelve de 567 hectáreas. Están declaradas como zona de especial protección de aves (ZEPA).
- A través de la cañada del Fontanal, desde la carretera de Chiclana a Medina, se puede acceder a las dos lagunas. Es necesario la autorización de la Agencia de Medio Ambiente para realizar las visitas.